El
primer paso para armonizar nuestra vida a nivel de Estrés es un
reconocimiento previo de la situación para poder cambiarla ya que si se
desborda nos puede conducir a una enfermedad somática.
El
Estrés forma parte de nuestra vida. Sufrimos y nos adaptamos a ello, lo
paliamos, si no nos estresamos. Sin el estrés, tendríamos una actitud
de imprudencia temeraria. Una dosis de Estrés nos sirve para sobrevivir.
Lo descubrimos en nosotros entre los 0 y 7 años generando el Estrés
productivo, una ligera alerta para ponernos en marcha en nuestra vida.
Existe
una delgada línea que nos separa del Estrés tóxico, aquel que nos
enferma y descontrola. Un ejemplo de la biología, si colocamos una rana
en un recipiente que calentamos suavemente el animal se va acomodando a
la situación sin huir de ella hasta que muere. Así, nosotros nos
acomodamos a las situaciones que no nos gustan anestesiándonos, con
hábitos poco saludables y aguantando situaciones incómodas.
Las
situaciones tóxicas las llevamos a todas las áreas de nuestra vida.
Anticipando y proyectando en nuestra cotidianeidad la situación
pendiente de resolver y alejándonos del presente. Nuestra mente se
convierte en un “Mono Saltarín” (Monkey Mind) saltando del presente,
entre el pasado y el futuro.
La
vida se puede ver como un 90-10. El 10% de los hechos, simplemente
ocurren escapando a nuestro control. El 90% restante está bajo nuestra
actuación como resultado de nuestras decisiones.
El Estrés tóxico nos genera un cambio hormonal, el cuerpo produce la hormona BDNF y Cortisol.
El Miedo, la Ira y la Tristeza, nos producen cambios hormonales, solo
vemos el problema y no soluciones. “Stress Shrinks Brain Networks”; hay
estudios científicos que demuestran que las redes neuronales estresadas
están comprimidas, mientras que es estados relajados las redes
neuronales se expanden y crean nuevas conexiones, nuevas sinapsis.
El cerebro y la inteligencia:
La inteligencia
nos sirve para manejarnos en la vida. La vida no es fácil está llena
de situaciones difíciles y problemas a resolver. El estrés aparece en la
infancia, desde el contacto o alejamiento de la madre, como fuente de
alimento y seguridad; La llegada a la guardería; la falta de atención de
los amigos en la adolescencia; el acceso a un trabajo deseado, en la
juventud; y en la soledad en la madurez.
Las capacidades actualmente reconocidas por la comunidad científica podemos enumerarlas en:
- Memoria: presente desde los 6 meses.
- Lenguaje
- Numérica
- Velocidad de pensamiento.
- Espacial: orientarnos y situarnos en un lugar, calcular distancias.
- Creativa: diferente de la Imaginación y la fantasía. La creatividad la
podemos ver como la fantasía puesta a trabajar para encontrar
soluciones a las situaciones de siempre, usando las oportunidades.
-
Emocional: para reconocer lo que sentimos, Por qué lo siento,
Para que lo siento, y que voy hacer con ello y para reconocer lo que les
pasa a los demás, la empatía. Emociones, pasiones y sentimientos se
localizan en nuestro cerebro en un lugar diferente, en el sistema
límbico, gobernado por la Amígdala; distinto del lugar donde se sitúan
nuestro conocimiento, por tanto la emoción no se puede expresar de un
modo racional. En la Adolescencia, el adolescente, adolece = carece, de
experiencia y necesita ser aceptado por sus iguales como independiente
de los padres.
La
boca es el lugar de entrada de anestesiantes, por lo que en una
situación estresante buscamos opiáceos que sustituyan la carencia.
Llevarse algo a la boca es un gesto que nace desde la infancia, cuando
nuestros padres ante el llanto infantil ponían el chupete al bebé. Se
convierte en un anclaje, un gesto incorporado de manera fija
automatizado, sin pensar que utilizamos de modo reflejo antes
situaciones estresantes. Como ejemplo, se podría decir que fumamos por
razones emocionales, como anestésico o como elemento generador de una
cortina de humo detrás de la que ocultarse.
Las
emociones se sienten en el cuerpo, se manifiestan a través de síntomas
corporales. Escuchar el cuerpo es una forma de descubrir lo que
sentimos. La mente también se expresa a través del cuerpo. Somos uno
Mente y Cuerpo; Psique y Soma. Mantener la Salud se consigue escuchando
lo que nos dice el cuerpo, nos libramos de situaciones incómodas que se
somatizan.
Si
no te tienes que mover o te tienes que detener, posiblemente sufras
accidentes en rodillas, tobillos o en la pierna en general. Así podemos
sufrir dolores de cabeza ante situaciones contradictoras para
nosotros; problemas de espalda, tensión en los hombros, ante cargas
emocionales; dolores lumbares, ante miedos o situaciones que vivimos
como problemáticas con las personas.
El
Estrés tóxico es una forma desmesurada de defenderme de la vida. Nos
produce pérdida de atención, dificultad en resolver problemas,
frustración, ira o rabia, tristeza o miedo; creemos ver lo que no
existe; dejamos de ver lo que existe, que a veces el problema está
camuflado mediante medicación o sobrealimentación.
Ante
una situación que nos resulta estresante, podemos: Resolverla, o actuar
de 10 formas diferentes para no encontrarle solución:
- Creyendo que tenemos la solución;
- huir de lo que no funciona (mediante diversiones extremas, infidelidades, etc);
- Quedarme paralizado;
-
Llanto y lamentos, quejas; Sentirse victimas. Comportamientos
en los que siempre buscamos beneficios, entre ellos atraer elementos
complementarios: Víctima – Ayudador.
- Negar la evidencia
- Aprender a vivir con el problema y sentirse orgulloso; “Es que soy así”
- Echarle la culpa a los demás. Volcar la mierda en el vecino
- Cargar con el problema como un héroe.
- Pedir que te amen con el problema.
- Creer que se necesita alguien mas fuerte que uno mismo.
-
Híper-análisis que nos lleva a la parálisis, como el Insomnio
(“Como te vas a dormir, si tienes todo esto por resolver y requiere
atención urgente”)
El
Estrés Tóxico tiene mucho que ver con lo que no funciona. Una forma de
resolver el problema es “Ir a por ello”, …, sin estar estresado, sino
centrado, tranquilo y relajado, con ilusión. Es una defensa, poco
reconocible que podemos soltar.
La
acumulación de Estrés nos produce tensión. A mayor tensión, menor
atención. Distanciarnos nos permite ver una solución que está fuera de
la situación.
La Ansiedad es otro sistema defensivo y auto inducido, por no sentirnos preparados para la felicidad. Generada por:
- Altas expectativas, tiranizamos a uno mismo y a los demás.
- Necesidad de Aprobación por todo el mundo. Una creencia irracional que nos lleva a ser esclavos de los demás.
- Deseo de un bienestar fácil y fluido.
- Deseo de éxito en todo lo que hago.
El
Estrés nos lleva a correr, hablar rápido, al escapismo, a posibilitar
tener problemas de articulaciones y la Ansiedad a paralizarnos,
entumecernos, ocultarnos negado la realidad.
Cada uno tiene que encontrar lo que le sirve o le ayuda.
Sugerencias: La Relajación, El ejercicio moderado, la meditación, el Mindfulness (atención
o conciencia plena), para llevar el Estrés y la Ansiedad a un nivel
operacional, para poder llevar la mente donde queramos, reconocer
quienes somos, reconocer la vida como algo proveedor y no amenazante,
reconocer nuestros propios valores personales, observar cómo
reaccionamos, en definitiva dar lo mejor de lo que somos.
Las Herramientas que encontramos para realizar esto pueden ser:
-
El Escáner corporal, reconocerse y sentirse descubriendo
aquellas partes del cuerpo que no siento, donde pueden encontrarse
almacenadas nuestras situaciones atascadas.
-
La Meditación, que nos permite reequilibrar la energía
corporal utilizándola adecuadamente, centrándose en uno mismo
permitiéndonos disfrutar y manejar la propia vida.
Vivir
implica un cierto grado de Estrés y Ansiedad que es aceptable y nos
permite funcionar a diario. El exceso descontrolado y el defecto acusado
nos sumergen en corrientes que nos llevan a la deriva y nos convierten
en monigotes de la existencia.
Mientras hay vida hay esperanza y posibilidad de elección.
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